jueves, 13 de abril de 2017

¿Por qué nos gusta besar?

Investigué esto porque me pregunté hace unos días el por qué nos gusta besar. Coincidió con la fecha y les preparé este artículo.

Hoy 13 de abril se celebra el Día Mundial del beso. La gente no tiene mucho que hacer en estos días y desde hace algún tiempo los Días Internacionales vienen incrementándose perdiendo así la importancia de dar atención a los fines que realmente lo requieren.

Pero bueno, supongo que hoy leerán artículos relacionados con este tema. En unos leerán que los besos son una forma cultural del cariño, del afecto, del deseo y quizá hasta de diversión. Otros dirán que es bueno porque ejercita 30 músculos, porque quema calorías o porque disminuye el estrés. También que estuvo prohibido hacerlo públicamente durante la Revolución Industrial o que aún está prohibido en Dubái y muy mal visto en algunos otros lugares.

Algunas investigaciones sugieren que el origen del beso es la succión del bebé. Otros psicólogos evolucionistas piensan que el beso fue en los inicios de la humanidad una forma de alimentación pre procesada para los bebés, tal como lo hacen algunos animales hoy en día como, por ejemplo, los pájaros. Esta práctica no era muy extraña para nosotros en los años que no existía comida procesada y además servía para transmitir una dosis extra de zinc, hierro, carbohidratos y generadores de anticuerpos a través de la saliva. En un beso de 10 segundos se pueden transmitir hasta 80 millones de bacterias. El 90% de la humanidad se afana en practicarlo y algunos animales también; como por ejemplo, chimpancés, zorros y perros que se lamen, algunas aves ponen sus piquitos juntos y los elefantes meten sus trompas en la boca de su pareja.

Pero ¿En realidad por qué nos gusta?

¿Por qué lo hacemos? No por las razones antes mencionadas. Si no lo sabemos, y besar es tan popular, es porque es una ventaja evolutiva, uno de nuestros instintos primarios de conservación. El beso es en realidad un acto evolutivo de selección natural (que yo veo lógico y muy eficaz; sobretodo en mi caso, jajaja. Se les corre la panty, jajaja).

Lo que sucede es que los besos transmiten información genética de compatibilidad a nivel hormonal entre las personas e información sobre nuestro estado de salud volviéndonos o no atractivos para la procreación. Los receptores de mucosa en nuestras bocas son sensibles a las hormonas y feromonas. En estudios, sorprende que las parejas más estables son las que comparten el mismo tipo de bacterias y hormonas. En otras palabras podemos decir que en la boca “hay química” y ésta se relaciona con diferentes sistemas químicos del cerebro:

La dopamina está asociada a la búsqueda de la novedad, a tomar riesgos, a la curiosidad y la creatividad; La serotonina está ligada a la calma, a la cooperación, a la lealtad y la tradición; La testosterona a la toma de decisión y al control de las emociones; y el estrógeno junto a la oxitocina está relacionado a la crianza, a la paciencia y las habilidades sociales.

Los hombres prefieren besos más húmedos y con la boca más abierta porque están inconscientemente tratando de transferir testosterona para provocar el deseo sexual en las mujeres.

Así que si después de un beso quedas algo decepcionad@, ya sabes a qué se debe: No es tu tipo o está algo baj@ de hormonas.